Paseo Sáenz Peña

#HistoriadeBarrio

Es el punto de encuentro del arte, la bohemia, la historia y el mar. Es, probablemente, la puerta grande de entrada a la zona patrimonial de Barranco, con sus bellas casonas de inicios del siglo veinte. Alrededor de Sáenz Peña se desarrolla buena parte de la actividad cultural y gastronómica del distrito. A lo largo del tiempo, ha albergado galerías de arte, centros culturales y salas de teatro emblemáticas que forman parte de la historia del lugar.

Los jardines de la alameda, el obelisco y las esculturas –como aquella dedicada a Neptuno– forman uno de los paisajes más especiales de Lima. Siempre hay luz en Sáenz Peña. El paseo remata por el oeste con el mirador; debajo de su estructura de madera coronada con flores, se exhibe un mural de azulejos elaborado por el artista Ricardo Wiesse. Al fondo, el mar. Esta es la vista que inspira los dos Armando de Sáenz Peña, desde sus fachadas hasta sus balcones.

Aquí, se puede visitar la galería y tienda de arte y artesanía Dédalo, y almorzar con una copa de vino en el Hotel B. A pocos pasos, las compras se hacen en La Sanahoria o Delifrance, o se queda para comer con amigos en Isolina o La73. Los paseos por el malecón pueden terminar con un helado artesanal en Blu o Crem de la Crem. Hay cafés, librerías, tiendas de decoración, casas culturales, restobares… la atmósfera bohemia se respira, así como la brisa del mar. ¿En dónde más podrías encontrar la inspiración constante de vivir rodeado de arquitectura, diseño y arte?